Mi Buenos Aires querido
Tengo un defecto, aunque es un lindo defecto: soy porteña. Mi relación de amor-odio con la Argentina no me deja indiferente. Siempre me echa con esa forma que tiene ella, con sabor a fulbo y me llena a pelotazos. Si uno la observa bien, en Usuahia, parece tener una especie de piecito que arroja no solo a las Malvinas, sino a muchos, como yo.
Estudiando el mapa, la parábola concluye en Europa, pero la Argentina, pese a todo, gran goleadora, puede patear de chilena, rabona, de taco o de chanfle; con lo cual, uno puede ir a parar donde sea, fuera o dentro de las coordenadas físicas de nuestro planeta. Porque a priori, parece que la argentinidad encuentra una ontología de puntapié que lleva a patear el tablero de la esperanza, pero, también, ¿por qué no?, de mandar la pelota hacia adelante, victoriosos.
Si en mi vida todo hubiese sido equilibrio, no sería yo, posiblemente ante el sosiego no hubiese necesitado la palabra, la cual me ayuda a exorcizar el dolor, a expurgar, a limpiar y reescribirme. Lo cierto es que mi necesidad de expresión muy posiblemente venga de este río/mar tan inmenso, ruta mágica del Pampero; de hielo, selvas y de pampas, de yerba, chamullo y ese qué sé yo melancólico venido de arrabales de inmigrantes con ese empezar otra vez de cero.
El Tigre, Buenos Aires.
Olivos, Buenos Aires.
Fui hija de la dictadura, nací en el 76, ¿qué se puede esperar de eso? Siempre buscando la libertad, terminé por irme lejos. Soy del año del dragón, más concretamente de fuego. Yo, como todos aquellos que nacimos por entonces, somos cambio, somos rojo, de revoluciones y pasiones, atardeceres y otros sueños.
El Obelisco, Capital Federal, Argentina
Taxis de la 9 de Julio, Buenos Aires.
Bar Los 36 Billares. Capital Federal.
Estoy hecha de boleadora, de fuelle y contrabajo. Soy suburbio y canción, ricotera y de tango. Soy “San Juan y Boedo antiguas, y todo el cielo, Pompeya y más allá la inundación… La esquina del herrero, barro y pampa; tu casa, tu vereda, y el zanjón… *
Caminito – La Boca, Capital Federal, Argentina
Caminito La Boca, Buenos Aires.
El Riachuelo, La Boca.
El Cabildo, Plaza de Mayo, Capital Federal.
La Casa Rosada, Plaza de Mayo. Capital Federal.
Edificios de la Av. de Mayo. Capital Federal
San Telmo, Capital Federal.
El Viejo Almacén. San Telmo. Capital Federal.
Villa 31. Capital Federal.
Como ven, no me deja indiferente. La amo y la odio al mismo tiempo. Me pregunto: ¿por qué no me deja entregarme, acurrucarme en su pampa o derretirme en sus hielos? Me expulsa, y sé el para qué:
Para que la ame platónicamente, como hace el poeta, bien de lejos.
EL RELATO EN IMÁGENES
* Tango Sur. Letra de Homero Manzi.
Música: Anibal Troilo.